Web del Hombre: 7 tips para darle el mayor placer (1 de 2)

1. Sé hábil

Cuando empieces a usar los dedos para tocarla, hay algunas cosas que debes tener en cuenta:

Colócalos en la posición adecuada.

Cuando una mujer se masturba, frecuentemente hace descansar su muñeca en su bajo abdomen, justo sobre el hueso púbico. Si tu pareja hace esto, trata de hacer lo mismo, ya que esto influirá en cómo sentirá ella tus dedos en la vulva. Trata de colocarte paralelo a tu pareja y poner tu brazo sobre su cuerpo hasta que tus dedos puedan alcanzar su entrepierna. Esto permitirá a tus dedos aproximarse desde el mismo ángulo en el que lo harían sus propios dedos.

Espera a que venga.

Los grandes amantes saben cómo empezar con delicadeza, con suaves caricias que rozan los muslos interiores y el vello púbico. No vayas más allá hasta que ella abra sus piernas o su pelvis se arquee hacia arriba. Entonces provócala y acaríciala hasta que los labios de su vulva inviten dentro a tus dedos.

Mueve la muñeca.

Los hombres usan típicamente un dedo cuando llegan a la zona de la acción. Cuando ella misma lo hace, sin embargo, ella involucra también su muñeca en el movimiento, aún si un solo dedo está tocando su vulva. Éste es un detalle sutil e importante que los grandes conocen.

2. Manténte entrenado

"Un hombre puede aprender cómo ser un mejor amante a través de la masturbación, aunque tenga una pareja regular. Una de las preocupaciones más grandes de los hombres es terminar demasiado pronto. La masturbación regular es la manera perfecta de aprender a reconocer los signos de que estás demasiado cerca al orgasmo" (Peter Sandor Gardos, sexólogo clínico de San Francisco).

Desacelera.

El miedo de ser sorprendidos motiva a los muchachos a aprender a masturbarse hasta el orgasmo lo más rápido posible. El problema es que esta actitud condiciona tu respuesta sexual de tal manera que llegas al clímax mucho más rápido de lo que te gustaría con tu pareja. Un orgasmo ocasionalmente rápido está bien, pero trata de encontrar un tiempo solo para relajarte y masturbarte por 20 minutos o más.

Otro peligro de terminar rápido es que crea sensaciones que no pueden ser reproducidas cuando no eres el único en el cuarto. Algunos hombres se acostumbran tanto a los rapiditos solitarios que tienen problemas en llegar al orgasmo cuando están con una pareja. Intenta cambiar de mano; ello te hará conciente de cada movimiento que hagas y evitará esos movimientos "automáticos".

3. Amplía tus horizontes

Un amante efectivo sabe que hay más en el sexo que el coito. No coge simplemente los pechos de una mujer y luego se va a la entrepierna. Busca el coito como una de varias opciones. Los terapistas sexuales mencionan varias posibilidades, desde usar juguetes sexuales hasta frotar tu pene en las diferentes partes del cuerpo de tu pareja, pasando por verla masturbarse. La actitud esencial, especialmente en una relación a largo plazo, es que nada en particular tiene que pasar durante algún acto sexual.